Los viajes de David y Neus: COSTA OESTE DE EEUU 14: Arches National Park

16 de octubre de 2018

Partimos por la mañana pronto de Tropic (donde habíamos visitado el Bryce Canyon) y después de unas 4 h de carretera llegamos al parque nacional de Arches. Dedicamos el resto del día a explorarlo, admirando las vistas de sus arcos de piedra y haciendo pequeñas excursiones en The Windows y en Devil’s Garden.

El parque nacional de Arches es otro de esos lugares singulares que acostumbra tener Utah. Y es que alberga la mayor cantidad de arcos naturales de arenisca del mundo, contando con mas de 2000. Esta maravilla natural atrae a millones de visitantes al año, convirtiéndose en uno de los parques mas visitados del estado. Una carretera panorámica lleva a los arcos mas singulares, y mediante pequeñas excursiones se puede llegar a los mas alejados. El parque tiene un gran problema con la poca cantidad de parkings que hay, produciéndose a menudo atascos en las zonas mas populares. Para evitarse molestias, mejor visitarlo fuera de días festivos y fines de semana (mas información aquí). De hecho, es posible que con el tiempo cierren el acceso por carretera e implementen un servicio de bus gratuito como en el parque de Zion.

Aquel día decidimos madrugar un poco, ya que teníamos un largo día por delante. A las 7 ya estábamos desayunando en la recepción de nuestro hotel de Tropic. Después de pagar nuestra estancia, nos pusimos en marcha enseguida. Teníamos por delante una larga ruta en coche de 4 h hasta nuestro objetivo de aquel día, el parque nacional de Arches, donde llegamos poco después del mediodía. Curiosamente, las primeras formaciones que vimos no fueron arcos, sino los altos acantilados de Park Avenue. Los acantilados eran bastante espectaculares, teñidos de un color rojizo, y parecían cincelados artificialmente ya que sus paredes eran completamente verticales. De hecho, su nombre viene de su parecido con la hilera de rascacielos de la famosa calle de Nueva York.

Park Avenue

Un poco mas adelante paramos en el mirador de las Courthouse Towers, otro conjunto de acantilados que alberga una de las formaciones mas famosas, las Three Gossips, que parecen tres personas que están cuchicheando entre ellas. Mas adelante nos paramos a ver otra singular formación, la Balanced Rock, un pináculo rocoso que tiene una gran roca en su ápice, la cual parece que se mantiene en precario equilibrio. El comienzo del parque de Arches nos estaba gustando mucho, y eso que no habíamos visto ningún arco todavía.

Three Gossips

Balanced Rock

El primer arco que veríamos es uno de los mas espectaculares de todo el parque, fue el Double Arch. Como indica su nombre, es un arco doble que nace de la misma roca. Este arco se encuentra en la zona conocida como The Windows, una de las mas populares del parque por sus espectaculares arcos, en la que nos costó un poco aparcar. Para llegar al Double Arch hay que caminar por un corto y fácil sendero. El arco nos dejó impresionados por su delicada belleza. Por el sendero podías acercarte hasta el roquedo de donde nacía el arco. Hasta que no te acercabas no podías hacerte la idea de la grandiosidad del arco, y a la vez de lo frágil que parecía. Para nosotros este es sin duda uno de los arcos mas espectaculares del parque.

Double Arch

Al sur de Doble Arch se encuentra un conjunto de arcos conectados por un sendero, así que nos acercamos a verlos. Como los dos parkings están situados a corta distancia, decidimos ir andando viendo los problemas de aparcamiento que había en esta zona. Tardamos menos de 5 minutos en llegar, y enseguida pudimos contemplar el primero de los arcos, la South Window. No podía ser mas diferente que el anterior arco; la apariencia de este era mucho mas robusta, pareciendo mas un gran agujero en un acantilado que un arco. Pero eso es uno de los alicientes de este parque: todos los arcos son distintos y cada uno tiene su encanto. A su lado se alza la North Window, un arco mucho mas esbelto que el anterior. De hecho, hay un punto desde el que se pueden ver los dos juntos, uno al lado del otro, en una vista maravillosa. El último arco de esta zona es el Turret Arch, muy curioso al tener su abertura con una forma ovalada muy alargada. Para volver al parking cogimos el Primitive Trail, el cual flanquea los arcos por el norte mediante un gran rodeo, pero nos pareció que no valía mucho la pena ya que no ves nada diferente. Aun así, la zona de The Windows nos pareció una de las mejores del parque y nos dejó muy buen sabor de boca.

South Window (izq.) y Turret Arch (dcha.)

South & North Window

North Window, visto desde el Primitive Trail

Abandonamos la zona de The Windows y a continuación fuimos a ver uno de los iconos del parque, el Delicate Arch. De hecho, también es uno de los símbolos de Utah y su imagen sale en las matrículas de los vehículos del estado. Como no teníamos mucho tiempo, nos decantamos por la opción mas fácil, que es verlo a través del “lower viewpoint”. Lo bueno es que llegamos tras solo 10 minutos de caminata; lo malo, es que el arco lo ves a casi 1 km de distancia. Aunque lo vimos a lo lejos pudimos comprobar que su nombre era muy apropiado por lo delicado que es. Lo sorprendente de este arco es que nace del suelo sin que haya ningún acantilado cerca. La mejor opción para contemplar el Delicate Arch es hacer una excursión al upper viewpoint; pero para hacerla se necesitan 2-3 h y superar casi 200 m de desnivel. Fue una lástima no tener mas tiempo.

El Delicate Arch visto desde el lower viewpoint

Nosotros nos decidimos por hacer la excursión a Devil’s Garden. Es una de las mas populares del parque, ya que es bastante fácil y permite admirar al menos 8 arcos diferentes. Para hacerla entera se necesitan unas 3 h, pero nosotros solo acabamos haciendo la mitad del trayecto. El primer arco que vimos fue el Tunnel Arch, que mas que un arco parecía un enorme agujero en el acantilado. Después nos acercamos a ver el Pine Tree Arch, muy robusto y achaparrado. Sin embargo, el mas espectacular que vimos fue el Landscape Arch, uno de los mas impresionantes del parque. Combinaba un grandioso tamaño con un arco tan delgado que parecía que se iba a desmoronar en cualquier momento. De hecho, en un plafón informativo explicaba que en los años 90 un grupo de excursionistas pudieron contemplar en directo como se desmoronaba una sección importante del arco. Nosotros pudimos apreciar el lugar exacto, ya que se notaban unas rocas de un color diferente. Eso nos hace pensar en lo frágil que son estas maravillas naturales, y esperamos que no tenga el triste destino del arco de Dwejra en Malta, que tuvimos la suerte de contemplar un par de años antes de que cayera al mar.

Tunnel Arch (izq.) y Pine Tree Arch (dcha.)

Landscape Arch

Después de pasar este arco, el sendero se hace un poco mas difícil. Hay una zona muy inclinada en la que hay que subir por una roca que puede resultar resbaladiza si no tienes el calzado adecuado. Superar el obstáculo tiene premio, ya que permite disfrutar de las bonitas vistas que hay a través del Partition Arch. Solo llevábamos una hora caminando, pero decidimos dar por concluida la excursión, para que a la vuelta no se nos hiciera oscuro. La excursión nos pareció genial, una gran forma de ver varios arcos, uno de ellos el super-espectacular Landscape Arch.

Subiendo hacia el Partition Arch

Partition Arch

La visita al parque nacional de Arches nos encantó por la originalidad de sus paisajes. Y es que cualquier día no se ven estos espectaculares arcos de piedra. La verdad es que en ese punto del viaje estábamos como en una nube, extasiados de todo lo que habíamos visto hasta entonces, y parecía que cada día superaba el anterior. Fue una pena no poderle dedicar mas tiempo, aunque la visita que hicimos fue bastante profunda. Mucha gente combina el Arches con el Canyonlands, que nosotros veríamos al día siguiente, pero pensamos que son dos parques que hay que ver con algo de tranquilidad, haciendo alguna excursión.

Con las luces del atardecer abandonamos el parque y nos dirigimos a nuestro alojamiento en Moab, la base mas popular para explorar la región. Habíamos reservado en el Days Inn by Wyndham, un motel casi nuevo situado al inicio de la ciudad. La habitación era grande y tenía de todo, la verdad es que estaba muy bien. El desayuno estaba incluido, y consistía en un buffet con bastante variedad de comida (dulce, salada, cereales, fruta…). El precio era algo caro, 106 € por noche, pero en general Moab era una ciudad cara para alojarse.

Nuestra habitación

Para cenar, no nos complicamos la vida y fuimos al restaurante que había justo enfrente del motel, el Broken Oar (además, nos hacían un 10 % de descuento). Pudimos pedir uno de los platos que mas nos hacía ilusión probar, la prime rib, una de las piezas de carne de vacuno mas apreciadas. En este restaurante la servían ahumada y cuando la trajeron nos pensamos que se habían equivocado, ya que habíamos pedido la ración mas pequeña y aquella era enorme. Pero parece ser que es un corte de carne grande, ¡menos mal que pedimos el tamaño mas pequeño! La carne nos pareció deliciosa y tierna. También pedimos una hamburguesa con bacon, pero llevaba tanto bacon que apenas notamos el sabor de la buena carne de la hamburguesa. Junto con una cerveza y una limonada, la cena nos salió por 56 $.