Del 4 al 10 de abril de 2012
Bélgica es un destino ideal para hacer una escapada de varios días. Sus ciudades son relativamente pequeñas y llenas de tesoros históricos por descubrir. Y para redondearlo, la llegada en avión es fácil debido a las muchas compañías aéreas que operan vuelos entre España y Bélgica, alguna de ellas con precios irrisorios. Además, moverse una vez allí es muy fácil grácias a la extensa red de ferrocarril y a la calidad del servicio.
Lo más turístico de Bélgica son las ciudades históricas de Flandes, principalmente Brujas, Gante, Amberes, Malinas y Lovaina. También es muy conocida la capital del país, Bruselas, que también lo es de la Unión Europea. A parte de visitar estas ciudades, también queríamos ver algo de Valonia, la región francófona y más desconocida de Bélgica. Por esa razón visitamos Namur, Dinant y Tournai.
El planning de las visitas de cada día fue el siguiente:
- Día 1 - Namur y Dinant: por la mañana llegamos al aeropuerto de Charleroi y fuimos a visitar Namur, la capital de Valonia. Por la tarde paseamos por el encantador pueblo de Dinant, y a la noche viajamos a Bruselas donde pasaríamos las siguientes tres noches.
- Día 2 - Bruselas I: día entero para visitar el casco histórico de Bruselas, donde nos encantó la Rue des Bouchers y sobre todo la espectacular Grand Place.
- Día 3 - Lovaina y Bruselas II: por la mañana visitamos la ciudad universitaria de Lovaina, conocida por su hermoso Stadhuis. Por la tarde volvimos a Bruselas para ver el Parc du Cinquantenaire y el barrio de la Unión Europea.
- Día 4 - Malinas y Amberes: por la mañana estuvimos paseando por Malinas, con su imponente catedral. Por la tarde visitamos Amberes, con un casco histórico pequeño pero interesante. Allí pasamos la noche.
- Día 5 - Gante: día completo para visitar los bonitos canales y los edificios históricos de Gante, la ciudad que más nos gustó de este viaje. Noche en Gante.
- Día 6 - Brujas I: bajo una intensa lluvia, visitamos durante todo el día el casco histórico de Brujas, donde además haríamos noche.
- Día 7 - Brujas II y Tournai: durante unas horas acabamos de visitar Brujas aprovechando que dejó de llover. Después viajamos hasta Tournai para visitar su famosa catedral, antes de volver a Bruselas para coger el avión de vuelta.
El rico patrimonio histórico y cultural de Bélgica nos encantó. Pasear por sus cascos antiguos es una gozada, y en muchos casos es todo un viaje en el tiempo, debido a lo bien conservados de sus edificios. Además, nos sorprendió con una gastronomía rica y variada, descubrir alguno de sus platos típicos es algo indispensable en todo viaje. Y los aficionados a las cervezas no tendrían que pensárselo mas, ya que las belgas están entre las mejores y de más variados sabores del mundo. Muchas son las razones para visitar Bélgica y ninguna os defraudará!
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