LISBOA 2: Alfama, Chiado y Bairro Alto

4 de agosto de 2010 Este día iba a ser denso turísticamente, así que nos convenía desayunar bien y salir del hotel rápido. Primero iríamos hacia el barrio de Alfama, uno de los más característicos de Lisboa. Después, recorreríamos los barrios que se encuentran hacia el oeste de Baixa, esencialmente Chiado y Bairro Alto. Para ir hacia la Alfama bajamos hasta la rua da Conceição, donde cogimos el Tranvía 28, el más famoso de Lisboa. Esta es una de las pocas líneas de tranvía (junto con la 12, 15, 18 y 25) que conserva su aspecto original y sus asientos de madera. 4 de agosto de 2010
Este día iba a ser denso turísticamente, así que nos convenía desayunar bien y salir del hotel rápido. Primero iríamos hacia el barrio de Alfama, uno de los más característicos de Lisboa. Después, recorreríamos los barrios que se encuentran hacia el oeste de Baixa, esencialmente Chiado y Bairro Alto.

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Para ir hacia la Alfama bajamos hasta la rua da Conceição, donde cogimos el Tranvía 28, el más famoso de Lisboa. Esta es una de las pocas líneas de tranvía (junto con la 12, 15, 18 y 25) que conserva su aspecto original y sus asientos de madera. Además, el 28 es el mas usado por los turistas, ya que atraviesa los barrios más populares de Lisboa (Chiado, Baixa y Alfama).
exterior del Tranvía 28
interior del Tranvía 28
interior del Tranvía 28
El 28 iba trepando por las inclinadas calles de Alfama, traqueteando y moviéndose tanto que parecía milagroso que no descarriláramos. Bajamos en la parada de la rua do Voz do Operário, que está justo al lado de Mosteiro de São Vicente de Fora, que solo vimos por fuera.
Mosteiro de São Vicente de Fora
Fuimos caminando a través del Campo de Santa Clara, una zona con muchas casas bajas con azulejos en las fachadas.
Campo de Santa Clara
Llegamos hasta la Igreja de Santa Engracia e Panteão Nacional, una iglesia donde están enterradas las personalidades de la historia portuguesa (sobretodo presidentes de la república). También hay monumentos a ilustres portugueses, como el descubridor Vasco da Gama. Se puede subir al exterior de la cúpula de la iglesia, desde donde hay unas vistas muy interesantes de Alfama.
exterior del Igreja de Santa Engracia e Panteão Nacional
interior del Igreja de Santa Engracia e Panteão Nacional
vistas desde la cupula del Panteão Nacional
Al salir del Panteón, pasamos a refrescarnos en el Jardim Boto Machado, con buenas vistas del Panteão Nacional. Deshicimos el trecho caminado hasta entonces y subimos por la empinada rua do Voz do Operário, hasta Largo da Graça, una agradable plaza rodeada por las típicas casas cubiertas de azulejos.
Largo da Graça
Cerca de esa plaza está uno de los miradores más impresionantes de los muchos que hay en la ciudad, el Miradouro da Senhora do Monte. Se trata de una pequeña colina que se eleva en el barrio de Graça, en el que hay una pequeña capilla. Desde sus jardines hay una panorámica espectacular: hacia la izquierda se ve el Miradouro da Graça y el Castelo de São Jorge. Un poco más hacia la derecha se aprecia todo el barrio de Baixa, en especial la praça Dom Pedro IV. Al fondo encontramos el río Tajo, el ponte 25 de Abril y el Cristo Rei. Al fondo a la derecha se insinúa la colina de Chiado, Bairro Alto y demás.
vistas desde el Miradouro da Senhora do Monte
Dejamos el mirador para dirigirnos hacia el castillo. A medio camino está el Miradouro da Graça, pero no lo vimos ya que pensamos que las vistas iban a ser similares al primero. Antes también pasamos por el Miradouro das Portas do Sol, otro mirador que en este caso está orientado hacia la Alfama y el Tajo, con lo que las vistas son diferentes. Es muy interesante para ver la arquitectura y urbanismo típicos de la Alfama; también se ven el Mosteiro de São Vicente de Fora y la cúpula del Panteão Nacional.
Miradouro das Portas do Sol
Entramos al Castelo de São Jorge, aunque antes tuvimos que hacer una larga cola y pagar una entrada de 7€. Al traspasar la puerta se accede a la plaza principal, donde hay una especie de terrazas con cañones desde donde se tienen unas vistas espectaculares de la ciudad: hacia el fondo izquierda se ven el río Tajo, el Ponte 25 de Abril y el Cristo Rei. Después se ve Baixa en toda su extensión, particularmente la praça do Comércio y la da Figueira. Fijándonos un poco también pudimos apreciar el Elevador de Santa Justa, la Igreja do Carmo, la praça Dom Pedro IV e incluso la Avenida da Libertade. Elevado sobre Baixa se intuyen los barrios de Chiado y Bairro Alto.
vistas del Castelo de São Jorge
Atravesando un denso pinar se llega hasta el castillo propiamente dicho, con sus torres, almenas y foso. Se puede pasear por casi todo el recinto, así como subir hasta la muralla y recorrer su camino de ronda. En la parte norte de las murallas hay unas bonitas vistas de la ciudad, donde se aprecian los miradores de Graça y de Senhora do Monte.
Castelo de São Jorge
Castelo de São Jorge
En el centro de la plaza principal hay una serie de edificios, entre ellos un restaurante y un museo. En este último se exponen objetos de las diferentes civilizaciones que han poblado el castillo desde sus primeros tiempos.
Antes de abandonar la zona del castillo decidimos pasear un poco por las callejuelas que conforman el antiguo barrio de Santa Cruz. Sus casas están pintadas de colores o cubiertas de azulejos. En estas calles nos daba la impresión de estar en un pequeño pueblo!
Rua de Santa Cruz do Castelo, Santa Cruz
Bajamos hacia la zona de la catedral, pero antes de entrar al monumento, buscamos un sitio para comer. Fuimos al Cruzes Credo Café (Cruzes da Sé, 29), un restaurante donde hacían hamburguesas, bocadillos, torradas y cosas por el estilo. Muy bueno y a un precio razonable. Lo malo fue el servicio, un tanto lento, ya que solo tenían un camarero.
Con el estómago contento visitamos , la Catedral de Lisboa. Por fuera, más que una catedral parece una fortificación. Esta iglesia románica del siglo XII y sus torres también forman una estampa típica de Alfama. Por dentro es sumamente oscura, con pocos adornos. Se puede visitar el claustro de la iglesia previo pago (la entrada a la catedral es gratuita).
Sé, la Catedral de Lisboa
Dimos por acabada nuestra visita a Alfama y fuimos a la parada de tranvía que hay justo enfrente de la Igreja de S. António da Sé. Volvimos a coger el tranvía 28 y nos dirigimos hacia Chiado. Bajamos en la parada que había en la Praça Luís de Camões. En aquellos días, en la plaza había una burbuja enorme para promocionar el Festival de los Océanos que se hacia por entonces. Dentro, además de aire acondicionado, había sillones y libros para culturizarse un poco.
Praça Luís de Camões
Una de las arterias principales de Chiado es la rua Garrett, una calle en parte peatonal con alegres terrazas y muchos restaurantes. Se cruza con otra calle importante, la rua do Carmo, la cual va bajando progresivamente hacia Baixa y destaca por sus tiendas de ropa y accesorios.
rua Garrett
rua do Carmo
Volvimos a subir por la Calçada do Carmo, hasta el Largo do Carmo, donde vimos las ruinas de la Igreja do Carmo. Esta iglesia fue destruida por el terremoto que asoló la ciudad durante el siglo XVIII y no fue reconstruida. Actualmente es un museo de arqueología, pero nosotros no lo visitamos.
Continuamos callejeando hasta llegar al Largo Trinidade Coelho, donde vimos por fuera la Igreja de São Roque. Esta zona pertenece ya al Bairro Alto, uno de los barrios más antiguos de la ciudad y actualmente más degradados, con edificios en ruinas y fachadas que se caen a trozos. Pero leímos que de noche es el centro de marcha por excelencia de Lisboa.
Cerca está el Elevador da Gloria, un tranvía que comunica la praça dos Restauradores con el Bairro Alto. Se trata de un tranvía antiguo, con interior de madera, y con una apariencia externa parecida al más conocido 28.
Elevador da Gloria
Este tranvía está cerca del Miradouro de São Pedro de Alcântara, el mirador más conocido del Bairro Alto. Las vistas son interesantes, pero a nuestro juicio no tan impresionantes como los miradores de Senhora do Monte o del Castelo de São Jorge, no hay tanta vista de Baixa. Lo que mejor se ve son las colinas del este de Lisboa, con los miradores de Senhora do Monte y Graça y el Castelo de São Jorge. Hacia la derecha se observa el Tajo y la Catedral de Sé.
vistas del Miradouro de São Pedro de Alcântara
Por último, paseamos sin rumbo fijo por las calles del Bairro Alto. Empezamos por la rua da Rosa, y fuimos bajando, cambiando de vez en cuando de calle para pasar por la rua da Atalaia, da Barroca, do Norte y das Gáveas. Toda esta zona daba la impresión de barrio degradado, con suciedad, edificios descuidados, etc. Aquí y allá iban abriendo pequeños bares preparándose para la noche.
Rua da Rosa
Rua da Barroca
Rua das Gálveas
Para cenar decidimos volver a la zona de nuestro hotel. Para ir desde el Bairro Alto hasta Baixa, se puede bajar rápidamente por el Elevador da Gloria o caminar por la Calçada do Duque, una calle con escaleras donde los restaurantes aprovechan el mas mínimo peldaño para poner mesas. Cenamos en uno de los numerosísimos restaurantes de la rua das Portas de Santo Antão. En concreto en el Restaurante Destino, donde pudimos degustar bacalhau com natas, uno de los platos típicos lisboetas.
Bacalhau com natas en el Restaurante Destino

2 comentarios:

  1. muy buen diagrama del dia!!Hicieron de todo!!!!soy argentina y espero poder viajar este enero a conocer, gracias por la data

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  2. Muchas gracias! Esperamos que puedas viajar y disfrutar de la ciudad, es muy bonita.

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