TAILANDIA 6: ruta entre Ayutthaya y Sukhothai

2 de enero de 2012 Ese día nos esperaba un largo viaje. Abandonaríamos Ayutthaya y partiríamos hacia el norte, hasta Sukhothai, otra de las interesantes ciudades históricas tailandesas. Por delante teníamos 400 km de carreteras y un largo viaje en bus, por lo que ese día casi lo perdimos viajando. Después de desayunar, hicimos la maleta pronto y salimos de nuestro alojamiento de Bann Khun Phra. Paramos un songthaew que iba vacío y pedimos al conductor que nos llevara a la estación de autobuses. Allí compramos los billetes y nos sentamos en una sala de espera con asientos. No tuvimos que esperar mucho tiempo, ya que había autobuses cada 20 minutos entre Ayutthaya y Sukhothai.

2 de enero de 2012

Ese día nos esperaba un largo viaje. Abandonaríamos Ayutthaya y partiríamos hacia el norte, hasta Sukhothai, otra de las interesantes ciudades históricas tailandesas. Por delante teníamos 400 km de carreteras y un largo viaje en bus, por lo que ese día casi lo perdimos viajando.

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Después de desayunar, hicimos la maleta pronto y salimos de nuestro alojamiento de Bann Khun Phra. Paramos un songthaew que iba vacío y pedimos al conductor que nos llevara a la estación de autobuses. Allí compramos los billetes y nos sentamos en una sala de espera con asientos. No tuvimos que esperar mucho tiempo, ya que había autobuses cada 20 minutos entre Ayutthaya y Sukhothai.

calles de Ayutthaya cerca de la estación de buses

El bus al que subimos iba completamente lleno y era bastante cómodo. El viaje transcurrió sin problemas. Hacia al mediodía el autobús hizo una parada de unos 20 minutos para comer. Estábamos en un restaurante de carretera donde comimos a la carrera un plato de arroz con huevo.

En total el viaje duró 6 horas y media y llegamos a la estación de autobuses de Sukhothai casi a las 4 de la tarde. Allí había un plafón informativo donde ponían las tarifas de los diferentes trasportes (tuk-tuk, songthaew, minivan) para ir hacia el centro de la ciudad. Por una vez no tuvimos que negociar, todo un respiro!

Cogimos un songthaew hasta el que sería nuestro alojamiento los próximos dos días, Lotus Village. Sin duda, fue uno de los mejores alojamientos que tuvimos en nuestro viaje. Consistía en un conjunto de bonitos bungalows rodeados por unos espléndidos jardines. El nuestro era amplio y limpio, con lavabo y ducha.

jardines y bungalows de la Lotus Village

nuestro bungalow en Lotus Village

El día anterior, Neus había tenido un pequeño percance con la bici en Ayutthaya, y tenía una herida en la mano. Así que nos acercamos al centro para buscar una farmacia. El farmacéutico resultó ser un tipo muy simpático, con un poco de pluma, que hablaba muy bien inglés e incluso alguna palabra en castellano. Nos contó que había estado en Madrid y Barcelona y que le gustaba mucho la "paela".

El resto del tiempo hasta la hora de la cena nos lo tomamos de relax, descansando en la habitación. No teníamos tiempo de visitar nada. Hacia la noche fuimos a cenar al mercado nocturno de Sukhothai. No tenía nada que ver con el que habíamos visto en Kanchanaburi. Era un sencillo recinto donde estaban las cocinas de unos pocos restaurantes, que tenían mesas y sillas en el exterior. De ellos elegimos el JR, donde cenamos ensalada, fideos con pollo y salsa cremosa y unas costillitas de cerdo fritas, a las cuales nos aficionamos a lo largo de nuestro viaje. Como siempre, todo muy bueno!

restaurante JR en el mercado nocturno de Sukhothai


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