ARGENTINA 21: Escala en Nueva York (EEUU)

17 de enero de 2015 La última etapa de nuestro viaje por Argentina iba a ser una escala en Nueva York de 11 horas, en las que aprovechamos para dar un paseo por el Midtown de la ciudad. Empezando por Penn Station, fuimos hacia al norte pasando por la NY Public Library, la Grand Central Terminal, Park Avenue, el Rockefeller Center, Times Square y acabamos disfrutando del sol en Central Park. A las 6:30 de la mañana aterrizó nuestro vuelo de American Airlines en el Aeropuerto JFK de Nueva York, procedente de Buenos Aires. No habíamos pasado muy buena noche durante el vuelo, bajamos del avión medio-atontados, pero decidimos mantener el plan de salir a la ciudad durante la larga escala de 11 h que teníamos.

17 de enero de 2015

La última etapa de nuestro viaje por Argentina iba a ser una escala en Nueva York de 11 horas, en las que aprovechamos para dar un paseo por el Midtown de la ciudad. Empezando por Penn Station, fuimos hacia al norte pasando por la NY Public Library, la Grand Central Terminal, Park Avenue, el Rockefeller Center, Times Square y acabamos disfrutando del sol en Central Park.

A las 6:30 de la mañana aterrizó nuestro vuelo de American Airlines en el Aeropuerto JFK de Nueva York, procedente de Buenos Aires. No habíamos pasado muy buena noche durante el vuelo, bajamos del avión medio-atontados, pero decidimos mantener el plan de salir a la ciudad durante la larga escala de 11 h que teníamos. Pero antes teníamos que hacer los arduos trámites de inmigración de EEUU, incluyendo el control del equipaje y su posterior re-facturación. Antes cambiamos nuestra ropa veraniega de Buenos Aires por otra de invierno, nos esperaba el frío de Nueva York. En total necesitamos dos horas y media para pasar todos los controles.

La forma más rápida y barata para ir desde el Aeropuerto JFK a Manhattan es sin duda el tren. Dependiendo de la zona de Manhattan a la que se vaya habrá que coger una línea u otra: si se quiere ir a Lower Manhattan (por debajo de 14th St) se tiene que coger el Skytrain a Howard Beach Station, mientras si se va a Midtown o Upper Manhattan, lo mejor es el Skytrain a Jamaica Station. Nosotros le habíamos dado muchas vueltas que zona visitar, ya que ya habíamos estado en Nueva York hacía 7 años. Lower Manhattan nos ofrecía la posibilidad de ver el memorial del 11-S, que todavía no se había construido en aquel entonces. Y Midtown tenía el aliciente del Central Park, que ya visitamos en el anterior viaje pero que no pudimos apenas disfrutar por el aguacero que nos cayó. Al final optamos por la segunda opción, así que cogimos el Skytrain a Jamaica Station. Al principio pensábamos que este tren era gratis, ya que no había barreras ni ningún sitio donde comprar billetes. Pero los tenías que pagar al llegar a Jamaica Station (5 $ cada uno)... un sistema muy raro, la verdad. Además tuvimos que comprar el billete del tren para llegar a Midtown (14 $ cada uno, ida y vuelta) y una tarjeta de metro (2,75 $).

En menos de una hora llegamos a la estación de Penn St. en Midtown. Al salir a la calle nos encontramos con un aire gélido. Ya nos esperábamos frío, pero estábamos a -3 ºC. Quizás nos teníamos que haber abrigado algo más... Nos encontramos ante un Nueva York tal y como lo recordábamos en nuestro viaje anterior: sus rascacielos, sus taxis amarillos, sus tiendas exclusivas, sus estridentes carteles publicitarios... Enseguida atisbamos dos de sus iconos, el Empire State Builing y el Chrysler Building, que sobresalían de entre los edificios mas bajos. Estuvimos paseando un buen rato por la zona de la 6th Avenue, callejeando mucho, la mejor forma de descubrir la ciudad.

Empire State Building

Chrysler Building

6th Avenue

El frío de aquella mañana fue un gran pretexto para acercarnos a la NY Public Library, una de las bibliotecas mas grandes del mundo. De entre los rascacielos neoyorkinos es sorprendente encontrar aquel edificio neoclásico, parece estar en un lugar equivocado. Quizás por eso es un edificio que ha salido en muchas películas, como Cazafantasmas, Sexo en Nueva York, El día de mañana... Su interior parece mas bien un palacio, con mármoles y paneles de madera labrada decorando las paredes. Cuando llegamos justo estaba abriendo sus puertas, así que no pudimos acceder a ninguna de sus salas de lectura, que abrían un poco mas tarde.

NY Public Library

NY Public Library, interior

Salimos nuevamente al exterior, y aunque iba avanzando el día, parecía que el sol no llegaba a calentar la ciudad. Fuimos hasta otro de los edificios históricos de Nueva York, la Grand Central Terminal. Su famoso vestíbulo es pequeño, comparado con las decenas de andenes de tren que tiene la estación. Estuvimos allí un rato contemplando el gran trasiego de gente para arriba y para abajo. Desde allí salimos a Park Avenue, una calle muy conocida por los rascacielos que la rodean. Aunque ninguno de ellos es de los mas famosos, constituyen una buena postal de Nueva York. Paseando por la calle pasamos por delante del Hotel Waldorf-Astoria, uno de los mas caros y famosos de la ciudad, que también ha salido en mil y una películas. Armándonos de valor decidimos entrar para dar un vistazo (en el primer viaje no nos atrevimos). Lo bueno era que había un par de vestíbulos (lujosamente decorados) antes de llegar a la zona de la recepción, así que pudimos chafardear un poco sin levantar suspicacias. Aquel sitio era tal y como lo imaginábamos, lleno de lujo y de gente distinguida, la verdad es que dábamos un poco el cante allí con nuestras pintas de turista-que-pasa-frío.

Grand Central Terminal

Entrada del Waldorf-Astoria

Interior del Waldorf-Astoria

Park Avenue

Continuamos paseando hasta el Rockefeller Center, otro de los sitios famosos de Nueva York. A sus pies había una pista de hielo muy popular entre los locales, aunque a aquella hora no había abierto todavía. Justo delante de la pista de hielo está el GE Building y su Top of the Rock, uno de los miradores mas altos e imponentes de la ciudad. En el anterior viaje subimos arriba y lo recordamos como una de las mejores experiencias que se pueden vivir allí. Cerca está la St. Patrick’s Cathedral que, al igual que la NY Public Library, parece extraviada con su estilo neogótico entre tanto rascacielo. Su interior es muy espectacular, con una nave altísima, lástima que todo el ábside estaba en obras. Al salir compramos un perrito caliente en un puesto callejero para entrar en calor (2 $). Estaba bueno, pero no tanto como los del Grey’s Papaya que comimos años atrás.

Comiendo un perrito caliente

St. Patrick's Cathedral

Interior de la catedral

Rockefeller Center

Luego fuimos hasta otro de los iconos de la ciudad, Times Square. Y aunque ya habíamos estado nos sorprendió muchísimo, no recordábamos que hubiera tantas pantallas publicitarias de televisión. La sensación de estar siendo bombardeado por tanta publicidad fue bestial. Además, había mas turistas que en cualquier otro lugar, y eso que mas que una plaza es un cruce ancho entre dos calles. Aquel fue el lugar que mas nos impactó de aquella segunda visita, y eso que la primera la hicimos de noche, cuando las luces son mas impactantes.

Times Square

Times Square

Times Square

Times Square

Después nos dirigimos hacia al norte por Broadway Avenue, donde nos compramos dos porciones de pizza y un agua por 2,75 $. Nos las comimos andando, no queríamos perder tiempo sentándonos en un restaurante. Llegamos a Columbus Circle, una gran plaza que nos trajo recuerdos de aquel primer viaje: cerca estaba nuestro alojamiento, un hostel infecto pero con una muy buena ubicación (cerró hace años). Finalmente llegamos a Central Park, donde había mucha gente paseando y tomando el sol para pasar un poco el frío. Aunque invierno no es quizás la mejor época para pasear por el parque, disfrutamos un buen rato por sus jardines. Llegamos hasta la Bethesda Terrace, una bonita terraza que es un lugar típico donde la gente se hace fotos, a orillas de un lago que estaba totalmente congelado.

Rocas erosionadas por un antiguo glaciar en Central Park

La ardilla es uno de los habitantes mas famosos del parque

Bethesda Terrace

Central Park y los rascacielos de Manhattan

Ya estábamos bastante cansados así que decidimos ir volviendo hacia el Aeropuerto JFK. Cogimos el metro en la 72th Street hasta Penn Station, y de allí a Jamaica Station y al JFK. El control de equipajes de mano fue muy rápido y además no tuvimos que volver a pasar el trámite de inmigración, como nos pensábamos. Finalmente cogimos el vuelo de American Airlines a las 17:35 h rumbo a Barcelona, dando por acabado aquel fantástico viaje por Argentina.

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