HUNGRÍA 2: parque nacional de Matrai y Hollókő

28 de junio de 2010 Amaneció soleado por fin, después de muchos días de tiempo nublado y lluvioso. Aprovechando el buen tiempo, nuestra intención era explorar el parque nacional de Matrai. Junto con la región de Bükk, éstas son las cordilleras montañosas más importantes del norte, en un país en su mayoría plano. También queríamos visitar la aldea tradicional de Hollókő un poco más al oeste. Antes de llegar a los Matrai paramos para ver el Sirok Var o castillo de Sirok, un castillo del siglo XIII que está en ruinas. Domina una pequeña colina, así que tuvimos que caminar durante menos de media hora para llegar hasta arriba. 28 de junio de 2010
Amaneció soleado por fin, después de muchos días de tiempo nublado y lluvioso. Aprovechando el buen tiempo, nuestra intención era explorar el parque nacional de Matrai. Junto con la región de Bükk, éstas son las cordilleras montañosas más importantes del norte, en un país en su mayoría plano. También queríamos visitar la aldea tradicional de Hollókő un poco más al oeste.

Ver Dia 2: Matrai en un mapa más grande
Antes de llegar a los Matrai paramos para ver el Sirok Var o castillo de Sirok, un castillo del siglo XIII que está en ruinas. Domina una pequeña colina, así que tuvimos que caminar durante menos de media hora para llegar hasta arriba. Las ruinas de este castillo no son gran cosa, estando Hungría repleta de castillos en mejores condiciones. Lo bueno son las vistas que ofrece. Hacia el este se ven las montañas Bükki y hacia el oeste el pueblo de Sirok y los Matrai, donde incluso se llega a apreciar la torre de televisión del Kékestető.
Sirok Var
Sirok Var, con el pueblo de Sirok al fondo
Sirok Var, con Sirok abajo y los Matrai al fondo
Sirok Var
Continuamos hacia los Matrai y subimos hacia el Kékestető, el pico más alto de Hungría con 1.014 m. Se puede subir en coche hasta casi arriba, donde hay un parking gratuito. En la cumbre hay barbacoas y actividades domingueras varias. Desde este punto las vistas no son muy buenas, ya que quedan tapadas por los árboles. Para tener una mejor perspectiva hay que subir a la torre de televisión (previo pago). Las vistas arriba son de 360º, y permiten ver las montañas del oeste o del este y la gran llanura que se extiende hacia el sur.
torre de TV en el Kékestető
vistas del Kékestető, con la gran llanura al fondo
vista hacia el norte del Kékestető
Después de bajar por una carretera llena de curvas llegamos a Gyöngyös, una pequeña ciudad al sur de los Matrai. En la oficina de turismo de la Fő tér nos proporcionaron un folleto en español de todas las atracciones turísticas. Después de comer, empezamos visitando la misma Fő tér o plaza mayor, muy alargada y peatonal, con una gran iglesia en su extremo, el Szent Bertalan Templom.
Fő tér
Szent Bertalan Templom
Cogimos la calle Szent Bertalan utca donde se halla la Zeneiskola, una antigua escuela jesuita que se transformó en escuela de música. En su fachada hay unas esculturas barrocas, copias de las originales hechas en madera de roble. Justo enfrente está el Szent Korona Ház o casa de la Sagrada Corona, ya que custodia entre otros tesoros la corona real de Hungría.
Abandonamos el centro histórico para dar un vistazo a los otros monumentos de la ciudad. Llegamos hasta el barrio judío, donde destaca su sinagoga nueva, una edificación enorme con una gran cúpula. Después visitamos otra de las iglesias importantes de la ciudad, la Ferences Templom o iglesia de los Franciscanos, considerada la catedral.
Ferences Templom
interior del Ferences Templom
Volvimos al coche y nos dirigimos a Gyöngyöspata, donde está la Római katolikus templom o iglesia católica de Roma. Dentro hay un importante tesoro, el Jessze-fa oltár o árbol de Jesse, una representación del árbol genealógico de Cristo situado tras el altar mayor.
Gyöngyöspata, Római katolikus templom
Római katolikus templom, Jessze-fa oltár
Después nos dirigimos hacia el pueblo de Hollókő. El trayecto en principio no era muy largo, pero la carretera mas directa, antes de llegar a Pásztó, estaba cortada. Así que tuvimos que hacer un amplio rodeo hasta Szécseny y después tomar un desvio hacia Hollókő.
Esta aldea está declarada patrimonio de la humanidad de la Unesco, ya que alberga construcciones populares muy bien conservadas. Éstas estan en una zona concreta del pueblo y no se puede circular con coche por dentro, así que aparcamos en un aparcamiento (gratuito!) y fuimos caminando.
La arquitectura popular de Hollókő es una muestra de la cultura palóc, grupo étnico de origen desconocido que puebla esta región desde el siglo XIII. Las construcciones actuales, pese a su apariencia, solo tienen un centenar de años, ya que las más antiguas fueron destruidas por incendios. Entre las diferentes casas destaca la iglesia, del siglo XVI, aunque fue usada como granero hasta el XIX. El conjunto de casas tradicionales no es muy grande, así que se puede dar un paseo por todo él sin estarse todo el día. Tambien hay un castillo o Var, al que se llega tras una excursión, pero nosotros no fuimos a verlo. Caminar por las calles de Hollókő fue como un viaje en el tiempo de centenares de años!
Hollókő
iglesia de Hollókő
Hollókő
Regresamos a nuestra base de Eger para cenar. Elegimos el restaurant HBH, al lado de la Dobó István tér. Cenamos el gulash o gulyás, el plato más típico de la cocina húngara. Es una especie de estofado con trozos de carne y algunas verduras (y paprika, que no falte!).
gulyás en el restaurant HBH

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